domingo, 14 de junio de 2009

Las monedas alternativas como idea-fuerza para repensar la economía


Con toda evidencia nuestra actual operativa económica y financiera debe pensarse de nuevo, debe estructurarse de otra forma, debe ponerse a tono con los tiempos que corren… Obviamente nuestras actuales estructuras socio-productivas deben ser actualizadas, deben ser reformadas en forma sustantiva… Por cierto que la estructura económica e institucional tiene que estar al servicio de la gente, y nuestra realidad actual con evidencia presenta desvíos excesivamente negativos e intolerables: (a) excluidos sociales, (b) periódicas recesiones económico-productivas, (c) muy injustas redistribuciones de recursos por causa directa e indirecta de acciones especulativas, de sobornos, de corrupción en distintos niveles y en distintas formas, de absurdos egoísmos y de abusos de funciones planteados por los diversos sectores de poder, (d) inconvenientes e incontroladas oscilaciones en los porcentajes de empleo y de desempleo en relación a la población activa, (e) regulaciones socio-económicas que son absurdamente asimétricas y absurdamente arbitrarias, (f) oportunidades muy diferentemente repartidas en el conjunto de la población, entre ellas, injustas diferencias en cuanto a las posibilidades de formación profesional y de acceso a la cultura ofrecidas a niños y a adolescentes y a adultos-jóvenes, etcétera, etcétera…

Las grandes preguntas que se plantean son: ¿Cómo reformar adecuadamente nuestro entramado financiero y productivo? ¿Cómo actuar frente a una crisis especulativa, cómo actuar frente a una crisis de sobreproducción, cómo actuar frente al repentino estallido de una burbuja de precios y de expectativas? ¿Cómo organizar mejor el intercambio económico internacional? ¿Cómo mejorar una economía nacional en cuanto a su funcionamiento financiero? ¿Cómo mejorar la educación y cómo desarrollar la formación continua o formación en servicio?…

Con evidencia no podremos dar respuesta a todos estos interrogantes en el marco del presente culturema… Comencemos entonces por algo modesto… Comencemos por intentar entender un fenómeno que no es excesivamente conocido, comencemos por analizar el tema de las monedas alternativas…

Obsérvese que la moneda social o paralela es tal vez una opción imaginativa para en algún grado atenuar las consecuencias de una crisis económico-financiera, en un momento de urgencia social y de peligro en cuanto a drásticos cortes en las cadenas de pago y en cuanto a drásticos aumentos en el nivel del desempleo…

Pero… ¿Qué es realmente una moneda social?… Pues bien, es un medio alternativo de pago que tiene una circulación muy restringida, generalmente en una determinada localidad, o más propiamente dicho en una red social orientada al intercambio de productos y de servicios entre sus miembros… En muchos casos, así se pretende integrar productivamente al sistema a personas que en el mercado laboral nacional probablemente tendrían pocas oportunidades de obtener un trabajo remunerado, ya fuere como trabajador dependiente o como trabajador autónomo…

¿De qué se trata realmente este asunto?… Pues bien, se trata que a través de la red circulen ciertos productos y servicios de una manera ágil pero en el ámbito cerrado del grupo social, en el ámbito cerrado de la cofradía, o sea exclusivamente entre los miembros integrantes de la red… Este sistema de intercambio es pues multilateral, pero en un formato que bastante se acerca al trueque bilateral clásico o tradicional…

Pongamos por caso un jardinero que realiza trabajos en su especialidad en cierta zona o localidad, pero que en lugar de recibir por ello dinero de circulación nacional, se le paga con bonos o vales que luego el trabajador cambia por fruta o por almuerzos o tal vez por un pantalón usado o tal vez por el lavado de ropa, a otros miembros adheridos a la red… Esos son los tipos de intercambios que generalmente se realizan en esa economía social o economía paralela: pequeños servicios y productos de bajo coste… Así, se incentiva a que cada cual haga lo que más le gusta y lo que mejor sabe hacer, y todo el mundo gana…

En muchos casos, una red de intercambio social de este tipo está integrada a un proyecto de mayor alcance, en donde tal vez coexisten una cooperativa de consumo, una comercializadora de productos locales con ramificaciones nacionales (artesanías, alimentos naturales frescos, conservas, etcétera), una comercializadora de servicios locales generales como podrían ser televisión por cable para abonados, cuidados médicos primarios, acompañantes de niños o de adultos mayores, servicios culturales, hogares diurnos y guarderías, pequeños trabajos domiciliarios de albañilería y de eléctrica, etcétera, etcétera… Esta integración y coexistencia de diversos proyectos (que podrían funcionar independientemente) dentro de una misma estructura madre, tiene la ventaja de proporcionar mayor cohesión y estabilidad a la estructura de participación, a la vez de dar una mayor diversidad de servicios y de posibilidades a los miembros, y tal vez de dar también una mayor firmeza financiera a la organización considerada en su conjunto…

Como podrá observarse, como podrá constatarse, los sistemas de intercambio basados en una moneda social se asemejan mucho a una economía de trueque en una comunidad cerrada, pero con algunas ventajas frente al trueque clásico que es restrictivamente bilateral… En efecto, el uso de monedas locales o sociales permite intercambios simultáneos o diferidos en el tiempo entre distintas personas, así como permite manejar en cada transacción diferentes escalas de valor…

Diferencia trascendente entre una moneda alternativa y una moneda nacional de curso legal forzoso, es que con la especie social no existe el fenómeno del préstamo a interés… Además y como supuestamente hay estabilidad de precios medidos en la nueva especie dineraria, no existe tampoco un interés por especular dentro de esa economía, ni tampoco un interés especial por acumular medios de pago en esa especie dineraria social; véase que una unidad en la moneda social bien podría significar una hora de trabajo no calificado, y entonces esa sería la referencia que podrían usar los miembros de la cofradía para valorar sus intercambios, sean ellos de servicios o de productos… Esa posible falta de interés por acumular moneda social se ve también reforzada por el hecho que este espacio económico restringido coexiste con el espacio económico nacional donde circula la moneda nacional… Téngase presente que la moneda de curso legal o forzoso seguramente será más apreciada por los agentes económicos que la moneda alternativa, y por tanto siempre habrá tendencia a gastar primero los montos que se tengan en la moneda social…

Pues bien, hasta aquí un resumen de lo que debe entenderse por moneda social o moneda paralela, especie que como se dijo está orientada al intercambio dentro de un grupo cerrado… Por ejemplo, experiencias de este tipo han funcionado por un período restringido y en un ámbito restringido, en países tales como Uruguay, Argentina, Francia…

Una mención aparte merecen los bonos que se usaron cuando la primer gran crisis financiera del siglo XXI que afectó a la Argentina, los que por cierto también deben ser considerados como dinero alternativo o dinero paralelo…

En efecto, recuérdese que el llamado Plan de Convertibilidad se instauró en Argentina en abril de 1991, y funcionó hasta diciembre 2001… Este plan que fue oportunamente aprobado por el Congreso de la Nación, contemplaba una equivalencia forzosa entre la especie dineraria argentina y el dólar estadounidense… Durante la vigencia de este sistema, los dólares estadounidenses circularon en Argentina a la par de la moneda local, y casi era indiferente entonces concretar un pago en la divisa estadounidense o en la divisa nacional, y por iguales montos…

En noviembre y principios de diciembre de 2001, durante la Presidencia de Fernando De La Rúa (10 diciembre 1999 – 20 diciembre 2001), abruptamente hubo gran desconfianza en que este sistema sería derogado, produciéndose entonces masivos retiros en dólares de los Bancos así como conversiones de la divisa nacional a la divisa estadounidense y así como numerosos giros en divisas al exterior… Obviamente la situación en esos días fue tan caótica desde el punto de vista financiero, que ello provocó la instauración de feriados bancarios así como la propia salida anticipada de Fernando De La Rúa como primer mandatario… La derogación formal del Plan de Convertibilidad fue finalmente aprobada en enero 2002, durante la Presidencia de Eduardo Alberto Duhalde (2 enero 2002 – 25 mayo 2003), concretándose en ese momento la devaluación oficial de la divisa argentina frente al dólar estadounidense…

La situación financiera de las Provincias Argentinas y de la propia población fue durante los feriados bancarios y durante los meses subsiguientes tan delicada, que no hubo más remedio que emitir entonces moneda nueva para así evitar el colapso de la economía y del sistema de pagos… Obviamente se quería que la nueva masa monetaria emitida sirviera para dinamizar los intercambios a nivel nacional pero que no se usara para comprar divisas extranjeras, y se optó en esa oportunidad por introducir nuevos instrumentos de cambio bajo la cobertura de ser Letras de Tesorería con un determinado vencimiento, pero con denominaciones pequeñas y aceptando que esos instrumentos iban a circular junto con la moneda nacional que aún quedaba en poder de los consumidores y de las empresas… Estas nuevas especies que entonces se libraron a la circulación técnicamente se llamaron Letras de Tesorería para la Cancelación de Obligaciones, y su introducción fue tan masiva y repentina en un momento que escaseaba el circulante, que la gente terminó por aceptarlas a falta de otro instrumento mejor… Con estas nuevas especies las instituciones públicas incluso pagaban los sueldos a los empleados públicos, y hasta se aceptaba el pago de impuestos con ese nuevo instrumento y a la par con la moneda nacional…

Estos bonos entonces tuvieron varias denominaciones según fueran las entidades que los emitían… Los más conocidos fueron los “patacones” emitidos por la Provincia de Buenos Aires, y los “LECOP” (“Letras de Tesorería para Cancelación de Obligaciones Provinciales”) emitidos por el Gobierno Federal… Por cierto, otras Provincias Argentinas emitieron también sus propios bonos en esa oportunidad, por ejemplo los “LECOR” en la Provincia de Córdoba, los “Federales” en la Provincia de Entre Ríos, los “CECACOR” en la Provincia de Corrientes, los “BOCADE” en la Provincia de Tucumán, los “Quebracho” en la Provincia de Chaco, los “PETROM” en la Provincia de Mendoza, etcétera… Años después y cuando la situación financiera de la Argentina mejoró, estos bonos fueron canjeados por moneda nacional…

Como características distintivas de este cuasidinero, corresponde destacar que las instituciones bancarias entonces no aceptaban depósitos en estas especies, y que tampoco había cobertura legal para hacer préstamos o cancelar préstamos con este instrumento…

Muy bien, hasta aquí un resumen de algunos de los usos históricos del llamado cuasidinero (dinero social y bonos de emergencia)… ¿Qué experiencia o qué enseñanza pueden dejarnos estas cuestiones?…

Obviamente esos instrumentos han sido usados en momentos de crisis y por un tiempo limitado, pero igual, algunas ideas y enseñanzas pueden extraerse de esas experiencias que usaron dinero de emergencia o dinero paralelo…

Véase por ejemplo que en los casos antes examinados no se contemplaba ni la posibilidad de concretar préstamos, ni la necesidad de pagar intereses, y esas son interesantes características de un sistema monetario, que bien podríamos imaginar que pudieran ser implementadas en algún ámbito económico, por ejemplo en la propia economía internacional controlada por moneda propia, controlada por una específica y particular moneda internacional desligada en forma rígida de una o varias divisas nacionales…

En efecto, en sí podemos imaginar que los sistemas antes mencionados y basados en bonos de emergencia o en moneda social, eran equivalentes a tener cuentas personales nominativas donde simplemente se iban registrando los créditos y los débitos de cada quien, a medida que cada quien fuera generando derechos o fuera realizando pagos… Y véase que en algún sentido el dinero fiduciario y también el cuasidinero, en sentido estricto son deuda de alguien… En el recién presentado caso de los bonos argentinos, los deudores obviamente fueron los Gobiernos Provinciales y el propio Gobierno Nacional… Y en el caso de los aludidos sistemas basados en dinero social, el deudor sin duda era la propia cofradía, puesto que la emisión monetaria en especies sociales era realizada por ella, en algún caso tal vez para pagar algún servicio brindado por uno de sus miembros, y también para dar una suma inicial a cada quien que se anotaba como miembro (así es generada una masa dineraria social al interior del espacio económico, la que circulaba en contracorriente de los bienes y de los servicios)…

Y como ya se dijo, algo muy parecido bien podría implementarse en la propia economía internacional, sin contemplar el pago de intereses a los titulares de las cuentas dinerarias que presentaran saldos positivos, y erradicando el mecanismo de los préstamos (al menos de aquellos que valoraran las deudas en moneda internacional)…

Dejamos aquí flotando esta posibilidad…

Por cierto, la modificación en las reglas de juego de los intercambios internacionales no será tarea fácil… Muchas resistencias se manifestarán, principalmente de parte de los países desarrollados, y especialmente de parte de Estados Unidos de América…

Lo que sí aquí deseamos dejar bien claro, es que la clásica figura del préstamo a interés no es intrínseca e inseparable con la introducción y el uso del dinero, o sea con la puesta en marcha de una economía dineraria… La moneda sin duda es un invento social, y el préstamo con pago de cierto interés también es un invento social, es una convención social… Y lo que así estamos afirmando no es ningún absurdo…

Absurda e injusta sí es la actual situación… Obviamente los intercambios internacionales están regidos por un sistema bastante complejo, pues el mismo es fruto de una larga evolución durante la que sucesivamente se fueron introduciendo parches y procedimientos especiales; además, también corresponde preguntarse si ese sistema no se complicó ex profeso, a efectos que pocos fueran quienes realmente lo entendieran…

Pensemos un poco… Pensemos simplificando…

Supongamos que recién viene de salirse de un período de oscurantismo, durante el cual los intercambios internacionales prácticamente eran nulos… Y supongamos que de buenas a primeras se aprueba un sistema mundial de intercambios muy parecido al actual (o muy parecido al que se aprobó en 1944 en Bretton Woods), y basado en el dólar estadounidense, moneda nacional que en algún momento se dijo era tan buena como el oro… Y supongamos entonces que comienzan a concretarse las primeras exportaciones…

En el caso hipotético planteado, sea entonces una exportación de mercadería concretada de cierto país a EEUU… Esa transferencia de bienes es entonces pagada con dólares estadounidenses, y ningún problema, pues según el acuerdo internacional luego el país en cuestión compra alguna cosa a otro, pagando con las especies recibidas…

Supongamos ahora la operación inversa, una exportación de mercaderías de Estados Unidos de América a un tercer país, y supongamos que ese tercer país ya agotó sus reservas de dólares estadounidenses y de oro… ¿Qué es lo que entonces hace EEUU para poder vender?… Pues muy sencillo, le dice al país que necesita comprar, firme aquí un préstamo, a tal plazo y con tal tasa de interés, y me paga cuando pueda, incluso en forma adelantada si es que a usted le conviene más; y si al vencimiento no puede pagar todo, le refinancio lo que quede impago…

¿No observa el lector una asimetría enorme en toda esta cuestión, asimetría que de una u otra forma termina favoreciendo al poderoso vecino del norte de América?…

Claro, las cosas por cierto no son tan simples y tan claras como aquí se plantean, puesto que los derechos de emisión de los dólares estadounidenses los tiene la Reserva Federal (FED), y puesto que el Gobierno Estadounidense actúa en el doble juego de deudor y de prestamista de dólares estadounidenses, así como su sistema bancario nacional…

¿Y por qué el Gobierno Estadounidense se ha endeudado en los niveles que se verifican hoy día?… Pues porque no ha tenido más remedio, pues era la forma de seguir vendiendo sus propias mercaderías a la vez de permitir que la economía internacional siguiera funcionando…

¿Y qué pasará si en algún momento el sistema colapsa?… Pues bien, todo dependerá de las circunstancias especiales de ese colapso, pero de una u otra forma quien va a salir ganando siempre será EEUU…

Vean ustedes, el gigante económico del norte no regala los dólares estadounidenses, sino que los cambia por riqueza de algún tipo, y encima se enriquece por otro lado en base a los intereses cobrados por préstamos financieros, pues claro, poner a funcionar la imprenta que genera sus divisas nacionales es algo que le insume un costo insignificante… Obviamente el deudor en todo este asunto es o la FED o el propio Gobierno Estadounidense (no importa mucho saber quien es el que realmente debe)…

Ahora bien, supongamos que hay una grave crisis financiera, como la que actualmente nos afecta hoy día, o peor aún que ella… ¿Qué es lo que puede pasar?…

Bueno, no soy adivino, así que no puedo dar aquí muchos detalles, pero lo que es seguro es que la riqueza que ya recibió EEUU no va a ser tocada, y entonces por algún lado la cosa se va “a arreglar”, ya sea porque muchas naciones pongan dólares sobre la mesa (como está pasando hoy día), ya sea porque el dólar se devalúe (como esta pasando hoy día), ya sea una combinación de ambas cosas… Y en este contexto, los que realmente pierden siempre o casi siempre estarán fuera de EEUU, pues si el dólar se devalúa los afectados serán quienes tienen dólares, y a sus residentes EEUU siempre los podrá compensar de una manera o de otra (planes sociales, reducción de impuestos, etcétera)… Y si se ponen dólares sobre la mesa, a todos los países y a todos los Bancos Centrales les dolerá, salvo a la pareja EEUU-FED, pues ellos simplemente podrán poner a funcionar la imprenta de la Casa de la Moneda…

¿Se entienden las asimetrías?… ¿Se entienden las enormes ventajas que siempre está obteniendo EEUU y su sistema financiero con el sistema actual?…

Hay unos artículos y unos videos circulando por Internet, y que hablan de un verdadero complot financiero norteamericano, a raíz del cual se dejaría caer al dólar y se implantaría en su lugar una nueva especie dineraria: el amero…

Quienes sustentaron y dieron difusión a esta posibilidad de sustitución del dólar estadounidense por una nueva especie monetaria, e incluso se refirieron a una posible y futura Unión Monetaria Norteamericana en la que participarían Canadá, EEUU, y México, fueron Hebert G Grubel (académico) y Hal Turner (locutor y periodista), ambos estadounidenses…

Bueno estimados lectores, ¡qué decir de este asunto!…

Todo apunta a que esta historia sea una fantasiosa teoría conspirativa y supuestamente secreta, que pronto se integrará al grupo de leyendas urbanas, al grupo de leyendas modernas con mucho de ficción y con poca base en la realidad…

De todas formas algo que en principio podría parecer totalmente descabellado y fruto de una mente enfermiza y divagante, bien podría transformarse en realidad cuando menos se lo espera, fruto de las reales urgencias del momento o fruto de algún tipo de planificación secreta…

Observe el lector que la crisis argentina que provocó la emisión de los antes aludidos bonos-letras afectó a los argentinos y eventualmente también a las empresas extrajeras y a los particulares extranjeros que tenían inversiones en Argentina… Pero si la crisis se produce en EEUU y ese país de hecho deja a su moneda actual en libre caída y emite bonos o moneda nueva de algún tipo (léase amero), tal vez los menos afectados serían los propios estadounidenses, y los más afectados serían los residentes en el resto del mundo, pues actualmente hay una enorme masa monetaria de dólares estadounidenses circulando fuera de EEUU, así como créditos de todo tipo expresados en la divisa estadounidense y en manos de no residentes en EEUU…

Y antes de terminar una última reflexión… Mi meta con este culturema, mi meta con los escritos de divulgación y de investigación ya publicados en los espacios Digimundo, no es que se sigan a pie juntilla las sugerencias del Centro de Estudios Joan Bardina ni que se adopte a toda prisa el dinero telemático a nivel mundial… Solamente espero que estas ideas ayuden a que más gente se interese en los temas monetarios así como en todas las posibles variantes y ramificaciones de la utilización del dinero…

Obviamente dejo a cada quien decidir si está a favor o en contra de la moneda telemática… Mi intensión principal con las acciones que actualmente estoy desarrollando, únicamente es llamar la atención sobre una cuestión que sin duda es muy importante, que sin duda afecta a mucha más gente de la que inicialmente pueda pensarse…

Las opiniones de todos los ciudadanos sobre nuestra futura estructuración financieras son todas ellas potencialmente interesantes, y merecen todas ellas ser consideradas…

La doctrina del neoliberalismo es la que hoy día tiene más adeptos pues en ciertos aspectos sin duda ha presentado resultados positivos… Pero también está la otra cara de la moneda, la otra cara del sistema, pues en muchos casos esa teoría pone excesiva atención a la marcha general de la macroeconomía, olvidándose del sustrato social… Solamente con la socialización de los objetivos del constructo social, es que podrá obtenerse paz social, bienestar generalizado, y equidad en la distribución de recursos y de oportunidades… Pero atención, el juego económico actualmente utilizado no es de suma cero, y el desequilibrio no está a favor del ciudadano común y corriente… Hay que concienciar a las bases, hay que abrir los ojos al pueblo… Si algún día quiere ganarse en términos de justicia, de equidad, de solidaridad bien entendida, no hay otro medio que cambiar las bases del juego económico-financiero…

El rostro visible del capitalismo global


Comenzaremos el presente culturema por transcribir un pensamiento del eminente científico judío de origen alemán, Albert Einstein…

El espacio y el tiempo son modos mediante los que pensamos, y no condiciones bajo las que existimos. El tiempo que percibimos a través de los relojes y de los calendarios, es una invención que sólo concierne al hombre y a su interpretación del entorno que lo rodea.

Sin duda profunda reflexión del gran científico y sabio Albert Einstein, que deja latente entre líneas que el tiempo y que la medición del tiempo no son realidades tan objetivas como en una primera instancia puede pensarse, sino formas para mejor comprender a la naturaleza y al universo y al propio ser…

Parafraseando a este gran pensador, bien podemos concebir y defender la afirmación que se presenta en el párrafo siguiente…

El espacio económico y la moneda son modos mediante los que hemos organizado nuestra vida social y nuestras relaciones de intercambio, y no esquemas rígidos y obligatorios de estructuración de nuestra existencia comunitaria. Las valoraciones y las asignaciones que establecemos a través de nuestro sistema de precios, de salarios, de empréstitos, y de contribuciones fiscales, notoriamente son un invento social, obviamente constituyen una convención social o contrato social, que debe coadyuvar al progreso de la comunidad y al bienestar de sus integrantes, y no servir de herramienta perversa para una muy despareja distribución de recursos, de posibilidades, y de esfuerzos, al interior del grupo.

El rostro visible del capitalismo global, o al menos uno de sus más importantes espacios, sin duda está constituido por la actividad bursátil así como por los espacios físicos y estructuras administrativas que se dedican a esta labor…

Muy lamentablemente, en los espacios bursátiles con frecuencia se utilizan procedimientos engorrosos, instrumentos opacos, papeles basura, cotizaciones que artificialmente se jerarquizan y que luego rápidamente se desinflan… Es que allí es donde principalmente se gesta la llamada economía de papel, contradiciendo así las buenas intensiones y las justificaciones idealizadas que fundamentaron la existencia de estos primeros foros orientados a promover la circulación dineraria, la inversión, y el progreso social… Es que allí se expresa con fuerza el capitalismo especulativo global, marcado por la codicia y por la ambición sin límites y sin escrúpulos… Son en buena medida las conductas oportunistas y los deseos exacerbados de participar en el juego bursátil, los que provocan las grandes y artificiales variaciones en las cotizaciones de las acciones, de los bonos, y de las obligaciones negociables, y los que en muchos casos benefician o arruinan a empresas y a inversionistas en una forma arbitraria, alocada, tonta… Y con cierta regularidad las Bolsas de Valores son entonces tapa de revistas y primeras planas en los periódicos…

En este año 2009 sin duda estamos inmersos en una crisis financiera global de grandes y profundas proporciones, cuyas consecuencias serán muy pesadas para las economías de la mayoría de los países…

Esta crisis financiera mundial se pone especialmente de manifiesto por cambios erráticos o inesperados en las cotizaciones bursátiles y en los valores inmobiliarios, por fusiones y absorciones de empresas, por quiebras bancarias y empresariales, por contracción generalizada del crédito, por elevación del déficit fiscal en muchos países, por desaceleración del crecimiento económico, por importantes cambios en los precios del petróleo y de otras materias primas, y también por un aumento persistente del desempleo, etcétera, etcétera…

¿Es que no existirá al menos alguna forma de capitalismo que no se encuentre acompañado de lágrimas y de arbitrariedad?…

Bueno, mi opinión es que sí puede existir un capitalismo sin grandes arbitrariedades y también sin grandes sufrimientos para un contingente muy importante de población… Mi opinión es que sí puede instituirse un capitalismo social, un capitalismo comunitario social…

Y esa especial estructura económica puede llegar a ser realidad, en una construcción social controlada por el dinero telemático, que es un instrumento orientado a facilitar los intercambios, y que es la antítesis de una herramienta oscura, de una herramienta que dificulta la comprensión y la evaluación de consecuencias…

jueves, 19 de marzo de 2009

Entre la esperanza y el desánimo


Agustí Chalaux i de Subirà fue un muy inteligente, tenaz, y perseverante investigador social catalán, que sin duda nos legó un muy interesante y valioso proyecto social, muy completo, holístico, con muy buenas ideas de base, con muy buenos enfoques sectoriales, y que da soluciones viables y concretas y prácticas a los grandes males de este siglo XXI, de este tercer milenio que recién comienza. Y en este sentido merece destacarse: (1) Definición de un nuevo modelo de sociedad, definición de una remozada visión socioeconómica, de una nueva arquitectura financiera, tanto en el ámbito internacional como en el ámbito de las distintas economías nacionales y de los distintos espacios regionales o provinciales; (2) Importante cambio de enfoque en relación al control del narcotráfico y en relación al control de actividades ilegales de diverso tipo y alcance, incluyendo los tradicionales robos y copamientos a mano armada; (3) Tratamiento nuevo y novedoso respecto de la marginación social y de la pobreza extrema; (4) También positivos efectos directos e indirectos respecto de la especulación en toda su amplia gama de posibilidades, especulación agiotista o de acaparamiento, especulación usurera, especulación financiera en bolsa de valores, especulación inmobiliaria, especulación de gran alcance y con gestación de lo que en la jerga técnica se conoce como burbujas de crecimiento descontrolado o burbujas económico-financieras, o burbujas de expectativas; (5) Incluso también interesante intervención en la problemática de la violencia social en los distintos ámbitos, familiar, callejera, racial, sociocultural, de género, etcétera; (6) También propuestas muy interesantes e innovadoras en temáticas educativas y pedagógicas, así como en relación a la afirmación de valores humanos y a la propia afirmación de la espiritualidad; (7) Defensa bien argumentada de la necesidad de dar un enfoque más racional y científico a las cuestiones sociales, y comenzando por el desarrollo de una adecuada terminología multidisciplinaria.

No obstante las ventajas destacadas que sin duda deberían atraer de inmediato la atención de las personas bien intencionadas, la propuesta de este pensador social catalán no ha tenido hasta ahora una repercusión acorde a las expectativas expresadas. Me explico, sin duda hay ya un buen número de analistas sociales y de pensadores y en general de ciudadanos, convencidos de los aportes positivos que podrían ser generados por aplicación de las propuestas de Agustí Chalaux de Subirà en distintos espacios y a distintas escalas. También hay varias instituciones educativas que en una u otra forma han integrado las ideas de Agustí a su hacer cotidiano y a su currícula de estudios. Con toda evidencia también ya existe tanto material escrito como material audiovisual de muy buena calidad en relación a la cuestión que aquí nos ocupa, el cual incluso está disponible en Internet, y el cual ha sido traducido a diferentes idiomas. No obstante estos aspectos sin duda positivos y que favorecen la difusión, las propuestas de Agustí aún no han alcanzado una circulación fluida en los grandes medios de comunicación social, y tampoco se tratan sus ideas en los ámbitos decisorios de mayor nivel, ni siquiera en España, país natal de este pensador.

¿Por qué se da esta situación? ¿Por qué no se analizan con seriedad estas ideas por parte de competentes grupos pluridisciplinarios? Entre otras cosas, el pensamiento de Agustí proporciona interesantes enfoques en relación a la atenuación o incluso posible erradicación de las burbujas especulativas y de las recurrentes crisis recesivas mundiales, de las recurrentes crisis socioeconómicas globales o regionales. Entonces: ¿Porqué en ciertos ámbitos técnico-políticos no se debate el proyecto social de este inteligente y emprendedor catalán, cuando por otro lado tanto preocupan estos temas económicos que hoy día afligen al mundo, y para los que no se avizoran soluciones sencillas y rápidas por ninguna parte?

Agustí Chalaux de Subirà era un buen orador y sin duda además tenía un atrayente carisma personal. Si en vida dicho pensador no logró traspasar esa barrera invisible que permite transformar una propuesta en un conocido paradigma de referencia para la acción, sin duda será porque hay unos cuantos elementos que en este caso están actuando en contra de una más acentuada difusión y consideración.

Quienes respetamos y admiramos a Agustí Chalaux de Subirà, obviamente deberemos aprovechar todas las ocasiones y los medios que se encuentren a nuestro alcance, a efectos de crear los ámbitos para que sus propuestas sean conocidas y discutidas, pues de otra forma por largo tiempo todo va a continuar más o menos en la misma situación que hoy día, pues las propuestas alternativas que circulan por ahí, inclusive en el G-8 o en el G-20 o en el G-20 ampliado, son meros paños fríos, son meros paliativos tal vez con ciertos efectos positivos sectoriales y/o de corto plazo, pero con un enfoque exageradamente sectorial o particular o restringido. Los entusiastas de las ideas de Agustí deberemos tratar de estar en el momento más adecuado con la sugerencia más adecuada, y/o con la exposición de motivos más ajustada a la situación, y/o con el material más adecuado y atrayente, pues caso contrario y con el desinterés generalizado que parece haber en muchos ámbitos, será difícil que podamos revertir el status quo actual. El propio Agustí desplegó en vida una actividad de promoción intensa y febril, esperando que un cambio se produjera en cualquier momento, esperando un reconocimiento más generalizado en el que sin duda tenía fe, pero esas condiciones más favorables se hicieron esperar. ¿Dónde está realmente el problema? ¿Por qué en este caso una mayor repercusión se revela como esquiva, a pesar de las relevantes acciones ya cumplidas?

Tratando de profundizar en estas interrogantes, en los párrafos que siguen haré referencia a varias reflexiones y observaciones formuladas por Jordi Griera i Roig, sin duda otro entusiasta admirador de Agustí. Este amigo maneja diversas posibilidades sobre el asunto planteado.

Por un lado señala que el problema tal vez radica en una oligarquía bien preparada y bien atenta, con gran determinación y empeño en perpetuar las ventajas de las que goza con el sistema actual, de las que goza con la organización jurídica-económica-social actual. Dicha oligarquía, dicha cima de poder y de riqueza y de mando, por cierto no es omnipotente, no es imposible de doblegar, pero sin duda tiene gran incidencia en los gobiernos y en los parlamentos, así como también en los medios masivos de comunicación social, y posiblemente también en el propio sistema educativo. Frente a esta situación poca cosa pueden hacer voces aisladas o emprendimientos modestos, al menos mientras no se den situaciones extremas en forma generalizada, al menos mientras muchas conciencias se encuentren adormecidas por un buen establecido adoctrinamiento, por un buen establecido sistema paradigmático referencial favorable al mantenimiento de nuestra actual ordenamiento socio-financiero.

Y Jordi Griera se pregunta si la actual crisis financiera global podría cambiar en algo esta situación. Y su respuesta es que en principio poca cosa va a cambiar, y que al contrario la oligarquía dominante va a salir fortalecida y no debilitada de las turbulencias productivo-económicas que se están dando, por la sencilla razón que las presiones que sin duda se están ejerciendo sobre los sectores de poder y de mando, van a hacer caer a los elementos más débiles e incompetentes, pero van a fortalecer a los sectores más duros e inteligentes, que supieron anticipar y predecir los cambios, y que supieron actuar en consecuencia. Así, a la salida de la actual crisis mundial que sin duda en algún momento se concretará, la plutocracia estará renovada, remozada, y tal vez incluso con una aureola de triunfo y de reconocimiento, pues no pocos la señalarán como los elementos salvadores, como los elementos que supieron revertir la crisis financiera y retomar la senda del progreso y del crecimiento. Así, cuando concluya la actual crisis económica mundial, la riqueza y el poder quedarán concentradas en menos manos, y quedarán concentradas en gente más inteligente, astuta, y competente.

Y continuando con sus elucubraciones, Jordi Griera se pregunta qué representan en este contexto los entusiastas del proyecto social de Agustí, y qué representan en general las voces discordes del actual estado de cosas, de la actual situación socioeconómica en crisis y con evidentes dificultades. Y este amigo se responde a sí mismo: Pues los disconformes somos una insignificancia, una especie de caspa en la cabeza pensante del pueblo, una especie de conciencia que sirve para dejar claro que hay libertad de pensamiento, pero que muy pocos se molestan en analizar lo que estos sectores están expresando y recomendando.

¿Qué debemos hacer para que nos oigan? ¿Qué debemos hacer para que las ideas de Agustí sean debatidas, evaluadas, y criticadas?

Bueno, al respecto Jordi Griera señala que ante todo debemos calmadamente valorar la situación, por cierto analizando las falencias que puedan descubrirse en la presente organización socio-productiva, pero también tratando de encontrar nuestros propios defectos de actuación para luego corregirlos. Y como defectos principales y que más inciden negativamente en el accionar de los entusiasta de Agustí y en quienes tienen la inquietud de proponer nuevos proyectos sociales y nuevos modelos de interacción e intercambio, inteligentemente este amigo señala los siguientes ítems: (1) Atomización; (2) Personalismos; (3) Inconcreción; (4) Falta de determinación, falta de coraje, falta de constancia, falta de medios, falta de experiencia; (5) Falta de capacidad para llegar al corazón de la gente, falta de capacidad de convencimiento y de sensibilización.

Con mis propias palabras trataré de explayarme y argumentar en relación a estos cinco ítems.

En relación al primer asunto, en relación a la atomización, en relación a las nuevas propuestas sociales que se visten y que se presentan al mundo, bien podría decirse que cada semana se formaliza en el planeta un grupúsculo nuevo, una nueva fundación o una nueva organización social no gubernamental o una asociación de hecho, con objetivos ambiciosos y por cierto con declaraciones grandilocuentes, objetivos y declaraciones que suelen no estar del todo mal, objetivos y declaraciones que generalmente son compartibles. Y por cierto la descoordinación entre estos grupos es muy notoria. Pareciera como que nadie desea integrarse y apoyar una iniciativa de otro, y así surgen centenares de miles de proyectos y de actividades. Basta que alguien tenga una idea prometedora y tal vez original, para que ello dé mérito a concretar una propuesta, y a fundar un movimiento o una agrupación o una asociación, precisamente a efectos de promocionar e impulsar este nuevo enfoque. Consecuencia: Nula sinergia, y también nula o escasa complementación. Cada cual atiende su nido sin preocuparse mayormente de cómo se está preparando el nido del vecino.

¿Y cómo se sale de esta situación? ¿Intentando formalizar una mega propuesta que sea abarcativa, o apoyando una de las propuestas ya concretadas? Obviamente, si se decidiera por esta última opción, todo el mundo diría: Apoyen la nuestra, apoyen la nuestra.

Por cierto, ni Jordi Griera ni yo mismo somos excepciones a la regla, así que obviamente proponemos se apoye el proyecto social y educativo de Agustí Chalaux de Subirà.

De todas formas, posiblemente hay varios argumentos a favor de la solución indicada. Por un lado las propuestas de Agustí ya han cumplido una interesante etapa de maduración, pues en líneas generales datan al menos del año 1984, momento de la fundación del Centro de Estudios Joan Bardina en Barcelona. Además, hay enfoques en este proyecto catalán que tal vez hoy día, con el estado actual de desarrollo tecnológico, no parezcan en forma alguna tan originales o revolucionarios. Por cierto, otra cosa muy distinta se daba en los años setenta y ochenta, momento en el cual los lineamientos fundamentales del proyecto social de Agustí fueron delineados; y éste es un elemento que merece ser reconocido. Por otra parte, esta propuesta social catalana es completa, es holística, pues intenta dar solución integral y exhaustiva a la gran mayoría de los problemas sociales y de las irracionalidades operativas hoy día presentes en nuestra realidad.

¿A qué apuntan estas argumentaciones y estos razonamientos que recién vienen de ser expresados? Muy simple. Tal vez el reconocimiento actualmente acordado al Proyecto Bardina podría ser mucho mayor, si fuera mucho mayor el número de adeptos. Si las adhesiones recibidas superaran un par de millones, posiblemente algún sector de poder se interesaría en este asunto, aunque más no fuere por razones meramente demagógicas o electorales.

Al igual que Jordi Griera, me declaro un bardiniano convencido, un bardiniano con todas las de la ley, pues he reflexionado mucho sobre esta propuesta catalana, y le he encontrado pocos aspectos flojos, asuntillos que por lo demás tienen solución.

Pero pasemos ahora al segundo punto: Personalismos. Por cierto la atomización y el personalismo están muy emparentados, pues el motivo de fondo de la atomización es el egocentrismo, una enfermedad muy generalizada y cuyos enfermos pocas veces se dan cuenta que la padecen. Y esta enfermedad se arraiga en las personas, hasta hincharlas e inflarlas como pelota. Una buena estrategia para intentar no padecer de esta dolencia, bien podría ser escudarse en un personaje con méritos notorios y con consolidados antecedentes, y en el caso que nos ocupa dicho personaje bien podría ser Agustí Chalaux. Por cierto no es necesario endiosar exageradamente los logros obtenidos por esta figura, pues no es imprescindible que lo que él haya dicho o escrito lo contemple todo y lo prevea todo. Los proyectos son todos perfectibles, y en especial cuando se los comienza a aplicar sin duda siempre se descubren detalles que tienen su importancia y que ameritan ajustes. De todas formas, Agustí Chalaux indudablemente expresó muchas ideas muy atinadas y muy prácticas, y lo hizo con brillantez y competencia.

Consideremos ahora el tercer punto o ítem: Inconcreción. Con toda evidencia, y por falta de recursos materiales y/o humanos, miles de propuestas se quedan en los prolegómenos, en las etapas iniciales.

Por otra parte es cierto, Internet es una herramienta muy idónea y provechosa, que cada vez más nos acerca ideas expresadas en puntos distantes en el tiempo y en el espacio. Sin embargo, es imposible interiorizarse de miles de propuestas, y tal es la polución informativa de la red de redes, que esto apabulla y desconcierta hasta el gallo mejor plantado. Ante esta riqueza tan grande de documentación, los usuarios de la red de redes terminan por no leer nada, o por leer propuestas que no son las mejores. Además, obviamente no se trata que los actores sociales solamente lean y piensen, pues también se les debe dejar espacios para actuar, para argumentar con elementos propios, para implementar, para convencer a sus relaciones.

Obviamente, desde las grandes tribunas periodísticas se llega de otra forma al ciudadano común y a los jerarcas de nivel medio, y se logra formar opinión de otra forma, pero acceder a este mundo para así obtener una amplia difusión no es siempre sencillo.

Analicemos ahora el cuarto ítem: Falta de determinación, falta de coraje, falta de constancia, falta de medios, falta de experiencia. Indudablemente quienes queremos un cambio radical en la organización social, es porque nos hemos convencido que hoy día se presentan irracionalidades, contrasentidos, injusticias, inequidades, ineficiencias, etcétera, y por todo ello es que pensamos que con urgencia se precisa un cambio, un gran giro de timón. Por momentos muchos de nosotros tenemos rabia, clamor, y ruego, a flor de nuestros labios y de nuestro aliento. Por momento muchos de nosotros nos sentimos tentados a gritar: Basta ya, las cosas han llegado al límite de lo irracional, y ya no se soportan más. Ahora bien, quienes esto pensamos sin duda estamos en diferentes situaciones económicas, pero en mayor o menor grado todos debemos tener una ocupación que nos genere ingresos para así poder subsistir, y para así apoyar a nuestras respectivas familias. Lo que quiero decir con esto, es que en buena medida nuestras elucubraciones sociales y filosóficas, por brillantes y completas que ellas sean o que ellas parezcan, son para nosotros una actividad secundaria a la que le dedicamos el tiempo que podemos. ¿Y quienes están del otro lado? ¿Y quienes son nuestras contrapartes? Bueno, indudablemente ellas son las oligarquías, los sectores de poder, e incluso una gran cantidad de actores que han descubierto falencias en nuestro actual ordenamiento social, y que basan sus medios de subsistencia precisamente en aprovechar esas falencias; y en esta gran bolsa que por cierto también es significativa en su conjunto, se encuentran los defraudadores de impuestos (pues quienes defraudan al fisco no sólo son los grandes emprendimientos, sino también el pequeño comerciante y el pequeño empresario industrial y el contrabandista, e incluso el informal que ofrece mercadería en la calle, e incluso el ilegal que acepta trabajar en negro, etcétera), y también se encuentran aquellos que hoy día desempeñan funciones que en el futuro ordenamiento desaparecerán o se reducirán (entre ellos los empleados bancarios, los administradores, los vigilantes privados, quienes transportan caudales, en general quienes pagan y quienes cobran, los abogados quienes deberán atender menor número de demandas civiles, etcétera), y también quienes hoy día desempeñan actividades ilegales (ladrones de guante blanco y también ladronzuelos y punguistas, rapiñeros, estafadores, narcotraficantes de gran escala o de bocas de venta, pillos de todo calibre y color, contrabandistas, etcétera), y también por cierto los especuladores, y también por cierto quienes hoy día deben y se las arreglan para no pagar, o quienes hoy día cobran por rubros que no les corresponden. Observe bien y evalúe bien el lector estas dos partes. Por un lado personas altruistas y/o soñadoras, que por sentimiento y por humanismo y por querer hacer el bien por el bien mismo, desean construir un mundo mejor, más solidario y cordial, más justo, más equitativo, más funcional, más racional, más eficiente, menos rabiosamente consumista, pero que por lo general deben tener una ocupación principal de la cual poder vivir en el día a día, de la cual poder subsistir. Y por otro lado otro conjunto de personas, algunas muy poderosas y con muchos medios a su disposición, pero todas con el común denominador que el nuevo ordenamiento social propuesto les perjudicaría, en el sentido que les haría perder buena parte de sus actuales ingresos, en el sentido que les obligaría a cambiar sus respectivas estrategias de supervivencia hacia otras actividades en la que no saben bien cómo les irá y en las que no saben bien cómo actuar. Para este segundo grupo mantener el status quo actual es de suma y capital importancia, pues en ello se juegan sus ingresos actuales y su actual modo de vida, y por tanto seguramente estarán dispuestos a hacer de todo para que las cosas no cambien, o para que ellas cambien lo menos posible. Recordemos en este punto ese divertido y conocido juego de palabras, ese emblemático dicho popular: Cambiemos todo lo que sea necesario, para que las cosas continúen más o menos por los mismos carriles de siempre (“Cambiemos todo lo necesario para que todo siga como está”, “Everything to change so that everything carries on as always ”, “Che cambi tutto perché non cambi niente”).

En resumen, sin duda poca gente querrá comprometerse con proyectos atomizados, exageradamente personalizados, inconcretos, que disponen de pocos recursos, y para colmo mal conocidos porque lo usual es que se los conozca por referencias de terceros, o por haberlos leído y analizado sólo en forma superficial.

Pero aún queda un quinto ítem por tratar: Falta de capacidad para llegar al corazón de la gente, falta de capacidad de convencimiento y de sensibilización.

Indudablemente las teorías económicas o sociológicas y también las cuestiones exageradamente técnicas, difícilmente llegan al corazón de la gente, y difícilmente logran convencer a cabalidad. Para convencer es muy conveniente motivar emocionalmente, y eso se logra con cierta facilidad con un buen discurso y con propuestas demagógicas, con propuestas muy politizadas e ideologizadas, con declaraciones grandilocuentes y prometedoras, con visiones idílicas que se dice estarán al alcance de la mano, con movilizaciones sociales espectaculares y masivas, con reiteradas e insistentes alocuciones en los medios masivos de comunicación social, con acciones públicas originales y pintorescas, y también por cierto con el boca a boca popular, o sea haciendo uso de una conveniente sinergia social, haciendo uso de un conveniente y cotidiano contagio social. En resumen, la teoría y la elucubración filosófica de alto vuelo por cierto no deben ser desechadas, pero también hay que construir una versión muy orientada a la divulgación general, que sea convincente, que sea atrayente, que sea emotiva, que logre entusiasmo, que movilice y motive, que invite al festejo, que por anticipado produzca alegría y esperanza. Obviamente sin teoría y sin planificación se hace inviable cualquier revolución o cualquier importante cambio estructural, pero para viabilizar social y políticamente un emprendimiento de este tipo también se necesita calor humano, también se necesita apelar al sentimiento y a la espiritualidad de la gente, también se necesita transmitir confianza y optimismo.

Y ya para terminar esta nota, transcribo a continuación algunos versos inmortalizados por la pluma de José Hernández, y plasmados en las hojas del libro “Martín Fierro”.

Hasta que el pueblo las canta, las coplas coplas no son, y cuando las canta el pueblo, ya nadie sabe el autor.

Procura tú que tus coplas vayan al pueblo a parar, que al volcar el corazón en el alma popular, lo que se pierde de gloria se gana de eternidad.

Lo que pinta este pincel ni el tiempo ha de borrar, y nadie se ha de animar a corregirle la plana, no pinta quien tiene ganas sino quien sabe pintar.

Hasta aquí los comentarios que por el momento deseaba plantear. Quedo a la espera de las sugerencias o de los aportes, que los eventuales lectores tengan la amabilidad de plantear.

domingo, 25 de enero de 2009

La conducción de la cosa política


Nuestra conducción política debe ser virtuosa, en el sentido que debe ser capaz de fijar un rumbo, y en el sentido que luego debe ser capaz de hacer camino siguiendo ese rumbo…

Desconfíe de los países en los que los gobiernos tratan de gobernar junto a una oposición parlamentaria que por encima de todo trata de hacer oposición política… Ello nos muestra una oposición parlamentaria poco inteligente y muy egoísta, así como un gobierno inepto…

La buena conducción política se las arregla para llevar adelante buenos proyectos de consenso, emprendimientos que deben ser bien comprendidos y aceptados por la mayoría de la ciudadanía, emprendimientos que deben ser apoyados casi por unanimidad por todos los partidos políticos con representación parlamentaria…

Y desde estas líneas y en relación a estas cuestiones, modestamente nos permitimos señalar la importancia potencial del proyecto social oportunamente definido y promovido por el pensador catalán Agustí Chalaux de Subirà…

Cierto, muchas de las ideas de este personaje español deberán ser convenientemente adaptadas a las realidades sociales y políticas del entorno en el cual se las intente aplicar…

Cierto, en la concepción de Agustí también hay algunas lagunas que rellenar e incluso algunos errores que enmendar…

Pero la semilla que este combatiente social nos legó, por cierto que es ella viable, y por cierto que ofrece oportunidades muy pero muy interesantes que no deberemos desperdiciar… Todo es cuestión de proporcionar a esta semilla, convenientes y adecuados nutrientes así como una regulada cuota diaria de sabia refrescante, para que ella pueda germinar en forma adecuada y para beneficio de la humanidad toda…

martes, 6 de enero de 2009

Propuestas más frecuentemente defendidas desde los espacios Digimundo


En los espacios Digimundo se presentan e incluyen variados escritos sobre diferentes tópicos, la mayoría de ellos en idioma español.

Las tesis o los temas sobre los que directa o indirectamente más se insiste desde estas plataformas, son los que en apretada síntesis se indican a continuación.

(a) Afirmación de lo hispano también como sinónimo de calidad, también como generador de nuevos e importantes paradigmas, también como centralidades desde donde se incide sobre la marcha de nuestra sociedad. La cultura hispana también ella se sitúa entre las más importantes y trascendentes de este mundo.

(b) Defensa de los valores liberales y democráticos, y defensa del uso de la tecnología también aplicada a la cosa social, también aplicada a mejorar nuestra organización societaria y nuestras relaciones sociales.

(c) Advertencia en relación a que los graves problemas que afloran en este inicio del siglo XXI, no tienen su origen en el sistema capitalista de producción sino en el tipo particular de capitalismo hoy día aplicado, clase o tipo de organización socioeconómica al que bien podríamos llamar con cualquiera de las siguientes denominaciones: capitalismo especulativo, capitalismo caótico y desordenado, capitalismo no inteligente, capitalismo con actividades informales, capitalismo ciego en cuanto a fines, capitalismo en donde la conducción estatal es superada por las distintas manifestaciones de intereses particulares. En su lugar y desde nuestras líneas, se defiende la idea de que un capitalismo social es posible, pero únicamente si en el mismo se hace un uso inteligente y generalizado de la tecnología, y particularmente uso de la tecnología digital también aplicada a esa importante herramienta de distribución de recursos a la que corrientemente llamamos"dinero".

(d) Defensa de la gran importancia del arte y de la literatura como generadores de valores y como afirmaciones de conocimientos. Defensa del arte comprometido y de la literatura comprometida, defensa de las manifestaciones culturales como vías de afirmación de valores y como vías de transmisión de mensajes sociales.

(e) Rescate del proyecto social de Agustí Chalaux de Subirà, idea que en germen concreta la más importante y trascendente propuesta social de los últimos trescientos años.

Todas estas cuestiones son tratadas en Internet desde los diferentes espacios web de la serie Digimundo, así como en las distintas publicaciones de Ediciones Cúdita.

Las publicaciones recién referidas son distribuidas gratuitamente en su formado digital, y pueden ser solicitadas en la siguiente dirección de correo electrónico: cudita1@yahoo.es

Gracias por interesarse en nuestras ideas.

Tesis más frecuentemente defendidas desde los espacios Digimundo


En los espacios Digimundo se presentan e incluyen variados escritos sobre diferentes tópicos, la mayoría de ellos en idioma español.

Las tesis o los temas sobre los que directa o indirectamente más se insiste desde estas plataformas, son los que en apretada síntesis se indican a continuación.

(a) Afirmación de lo hispano también como sinónimo de calidad, también como generador de nuevos e importantes paradigmas, también como centralidades desde donde se incide sobre la marcha de nuestra sociedad. La cultura hispana también ella se sitúa entre las más importantes y trascendentes de este mundo.

(b) Defensa de los valores liberales y democráticos, y defensa del uso de la tecnología también aplicada a la cosa social, también aplicada a mejorar nuestra organización societaria y nuestras relaciones sociales.

(c) Advertencia en relación a que los graves problemas que afloran en este inicio del siglo XXI, no tienen su origen en el sistema capitalista de producción sino en el tipo particular de capitalismo hoy día aplicado, clase o tipo de organización socioeconómica al que bien podríamos llamar con cualquiera de las siguientes denominaciones: capitalismo especulativo, capitalismo caótico y desordenado, capitalismo no inteligente, capitalismo con actividades informales, capitalismo ciego en cuanto a fines, capitalismo en donde la conducción estatal es superada por las distintas manifestaciones de intereses particulares. En su lugar y desde nuestras líneas, se defiende la idea de que un capitalismo social es posible, pero únicamente si en el mismo se hace un uso inteligente y generalizado de la tecnología, y particularmente uso de la tecnología digital también aplicada a esa importante herramienta de distribución de recursos a la que corrientemente llamamos"dinero".

(d) Defensa de la gran importancia del arte y de la literatura como generadores de valores y como afirmaciones de conocimientos. Defensa del arte comprometido y de la literatura comprometida, defensa de las manifestaciones culturales como vías de afirmación de valores y como vías de transmisión de mensajes sociales.

(e) Rescate del proyecto social de Agustí Chalaux de Subirà, idea que en germen concreta la más importante y trascendente propuesta social de los últimos trescientos años.

Todas estas cuestiones son tratadas en Internet desde los diferentes espacios web de la serie Digimundo, así como en las distintas publicaciones de Ediciones Cúdita.

Las publicaciones recién referidas son distribuidas gratuitamente en su formado digital, y pueden ser solicitadas en la siguiente dirección de correo electrónico: cudita1@yahoo.es

Gracias por interesarse en nuestras ideas.